Días de estar en casa

Muy mayor

Mi papás saben que estoy muy mayor.  Los achaques de la edad poco a poco van aumentando.  Sigo  con la tos que no se me quita, y aumenta mis escapes de pis.  Anoche antes de que se acostarán, cuando dormía en el suelo del salón, me desperté muy mojado: como los ancianos.  Mi papá me estuvo secando pero estaba empapado.  Otras veces ya me ha pasado pero anoche fue mayor.  Se han dado cuenta que las cosas irán a peor: son gajes de la edad.  Mi mamá ha pensado en bajarme alguna vez menos porque ve que muchas veces estoy dormido y me cuesta mucho trabajo las escaleras.  Ya han pensado en bajarme en brazos.
  A pesar de mi edad avanzada sigo con muchas ganas de comer a todas horas.  Mientras no pierda el apetito seguiré con ganas de vivir.

¡Salimos ¡¡¡

Ayer por fin mis papás y hermana pudieron salir después de muchos días en casa confinados por el coronavirus.   Dimos un gran paseo hasta el parque.   Casí no me acordaba de lo que era mi sitio de  más habitual.   Había mucha gente.  Mi papás decía que demasiado.

  Volví cansado.  Subí corriendo a beber agua. Demasiada agua, dicen que bebo.  Mi papá cree que me pasa algo en los riñones aunque la última vez que estuve en mi ¨médico¨ no salió nada mal en estos.  Pero la verdad es que cada vez tengo más ganas de agua.  Me la reponen muchas más veces que antes y acabo con todo el cacharro.  Claro, cada vez soy más mayor pues me aproximo a los 14 años que cumpliré en noviembre.  Este verano el calor será bastante malo para mí.